Entre los pliegues de mi piel se escurre el licor de la noche, embriagándome por dentro. Me recuesto entre jazmines risas y seducida por tu diáfana ternura, por tu maldita caricia etérea, dejo vertir tu esencia sobre mis senos.
En el rincón translúcido de la fantasía, se desdobla el deseo, callado y prohibido, de beber de tu ombligo la vida que me falta y descansar en tu pecho mientras te canto y susurro, mientras rio, contenta de saber que mis sueños descansan ahora sobre tu aroma...
En el rincón translúcido de la fantasía, se desdobla el deseo, callado y prohibido, de beber de tu ombligo la vida que me falta y descansar en tu pecho mientras te canto y susurro, mientras rio, contenta de saber que mis sueños descansan ahora sobre tu aroma...
6 comentarios:
El perfume de esos jazmines llegan hasta aqui junto a esas sonrisas.
:)
Es un sueño visitarte.
Saludos.
Ya me faltaba leerte sonreir...:)
Realmente Hermoso, esa sensación de plenitud es lo que hace que valga la pena vivir la vida.
No te conocia, pero desde ahora no te olvidare.
Lindos sueños, a veces mejores que la realidad...
Besos etéreos.
En esos rincones es donde yo quiero vivir e importar todas mis calamidades.
Saludos.
Publicar un comentario