Se acabó

Se acabaron los pretextos, uriderivación, se acabaron, se extinguieron con el sol o con la lluvia, se frenó el motor. Fue repentino, casi imperceptible, un día como cualquier día amaneció muerto el tonto y triste gato y se acabó. El silencio lo mató, la censura carcomió sus entrañas de felino, el olvido lo olvidó, el tiempo lo redujo a polvo de inquisición. Se acabaron los esfuerzos, uriobstinación, se acabaron, murieron con tu último no, con mi último deseo de confesión, sin sol y sin lluvia, sin pretexto-motor. Fue imprevisto, casi increíble, un día como cualquier día en donde amaneciste otro, lejos, y al marcarte sonó tu contestador.