Si tan sólo

Si tan sólo lo entendieras. Si tan sólo leyeras entre mis labios mi deseo, o entre mis ojos cristalinos mis carencias, y las acaraciaras. Si tan sólo estuvieras aquí y no te hubieras marchado ya hace dos vidas; si tan sólo, amor, me entendieras.
Y compartieras conmigo el fastidioso tedio de estar una vez más en el mismo lugar, de sufrir otra vez la resaca del vicio continuo de ser harpía. Si tan sólo me acompañaras y me perdonaras en nombre del mundo entero, si tan sólo fueras real y quererte no fuera una cuchillada a mi ingenuidad, si tan sólo amor, me quisieras...
Podría hacer de este martirio eterno refugio, podría convertir las tormentas en rocío, y volver a creer, y darlo todo, y entregarme al amor sintiéndome amada, y gritar todas esas palabras por prudencia muertas.
Si tan sólo, me quisieras...