Mi querido náufrago, acostado ahí como quien no espera nada mas que la muerte. En la orilla de un mar sin olvido descansa; no pudo con la espera, no pudo con el cansancio de vivir una vida a medias. Se ha rendido y ahora descansa, tiernamente demacrado.
Su pecho desnudo pone en evidencia sus carencias, con las costillas marcadas y la piel rasgada, con el alma rota y la esperanza ahogada, ¿quién podrá salvarlo de él mismo?
Se incorpora a la playa y en un segundo es sol y en el otro arena. Sostengo su mano. ¡No desvanezcas mi querido náufrago, no me dejes sola en esta isla por favor!
Pronto atardecerá y el dolor se disipará, pronto seremos algo más que náufragos perdidos.
Su pecho desnudo pone en evidencia sus carencias, con las costillas marcadas y la piel rasgada, con el alma rota y la esperanza ahogada, ¿quién podrá salvarlo de él mismo?
Se incorpora a la playa y en un segundo es sol y en el otro arena. Sostengo su mano. ¡No desvanezcas mi querido náufrago, no me dejes sola en esta isla por favor!
Pronto atardecerá y el dolor se disipará, pronto seremos algo más que náufragos perdidos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario